Una buena identidad visual es un elemento vital para tu negocio o proyecto.
Se trata de diseñar y desarrollar todos los elementos visuales que representan tu marca, desde el logotipo hasta los colores y tipografías, pasando por los estilos de imagen y los patrones.
Este proceso no solo da a tu negocio un aspecto profesional y coherente, sino que también asegura que tu marca sea reconocible y memorizable para tus clientes. Con una identidad visual corporativa fuerte, tu negocio será capaz de destacar en un mercado cada vez más competitivo.
Existen muchas soluciones para revivir visualmente tu negocio, sea para actualizarla, hacer un refrescamiento o simplemente complementarla.
Puedes optar por una de estas opciones:
En base a los atributos característicos de tu marca actual y de tu identidad visual modificamos algunos detalles para otorgarle su refrescamiento visual, sin modificar la esencia visual de la marca .
Se genera un cambio visual más drástico. Seguimos manteniendo el ADN de la marca pero el resultado no será tan parecido visualmente a lo que había antes. Se suele hacer en momentos de cambios estratégicos del negocio.
Si tienes ya un diseño, pero sientes que te faltan más elementos o un ecosistema visual más establecido y organizado, se generan esos elementos que te faltan en base a lo que ya tienes creado y te funciona.